El origen del primer mechero o encendedor convencional se remonta al siglo XVI, conocido en aquella época como la llave de chispa.
En esos tiempos, se prendía un trozo de tela o cuerda gruesa entrelazada, que era muy combustible, y así, actuaba de yesca. Este tipo de tela se usaba con las armas de fuego de avancarga. Básicamente, esta “tela de combustión fácil y lenta” se usaba para disparar armas de fuego con carga frontal.
¿Quién inventó el mechero?
Johann Wolfganf Döbereiner era un boticario que estaba en la Universidad alemana de Jena, y tuvo la brillante idea de encender automáticamente y por fricción, una ligera porción de gas que salía de forma regular y controlada por un pequeño orificio. (1816) Dando lugar al origen del primer mechero.
Evolución del primer mechero
En 1909, la evolución del mechero fue gracias a Carl Von Auer, un austrohúngaro que ya era conocido antes por perfeccionar la bombilla eléctrica y también inventor de la piedra de mechero.
Este hombre implementó una pequeña piedra que hacía chispa, en vez de utilizar el carísimo polvo de platino del mechero anterior, que al fin y al cabo, ambos desempeñaban la misma función.
Más adelante, en 1932, George Grant, de origen estadounidense, inventó el encendedor resistente al aire, llamado Zippo. Este nuevo mechero revolucionó el encendido con casi cualquier mal temporal.https://serigran.es/wp-content/uploads/2021/05/zipp-scaled.jpg
En el año 1945, salió al mercado el primer encendedor de gas sin mecha, dando lugar a una mayor competencia entre mecheros y cerillas. Ante la difusión de este nuevo artilugio, se aplicaron leyes de control sobre el nuevo prototipo de mechero, pero éstas no se cumplían.
Pasaron los años y aún seguía la lucha entre las cerillas y el mechero, pero obviamente el mechero tenía todas las de ganar, puesto que la cerilla se apagaba fácilmente y el mechero ya llevaba varios prototipos como de encendido con combustión lenta, encendido con polvo de platino/piedra, encendedor con resistencia al viento (Zippo), etc.
